29/6/07

Trilce

Hay un lugar que yo me sé
en este mundo nada menos
adonde nunca llegaremos.

Donde, aún si nuestro pié
llegase a dar por un instante
será, en verdad, como no estarse.

En ese sitio que se ve
a cada rato en esta vida,
andando, andando de uno en fila.

Más acá de mí mismo y de
mi par de yemas, lo he entrevisto
siempre lejos de los destinos.

Ya podéis iros a pié
o a puro sentimiento en pelo,
que a él no arriban ni los sellos.

El horizonte color té
se muere por colonizarle
Para su gran Cualquiera Parte.

Mas el lugar que yo me sé,
en este mundo, nada menos
hombreado va con los reversos.

Cerrad aquella puerta que
está entreabierta en las entrañas
de ese espejo. - Está? No; su hermana.

No se puede cerrar. No se
puede llegar nunca aquel sitio
- do van en rama los pestillos.

Tal es el lugar que yo me sé.

2 comentarios :

E.H.D. dijo...

còmo pudo vallejo predecir su muerte, era acaso una especie de agorero?

|-|µgØ dijo...

Creo que es el don de la premonición. Aún así su obra traspasa lo físico-material.