13/3/08

La deuda del obrero

Porque en el Perú, y particularmente en la sierra, a los obreros les hacen cumplir los patrones sus contratos civiles, valiéndose de la Policía. La deuda del obrero es coercible por la fuerza armada, como si se tratara de un delito. Más todavía. Cuando un obrero se "socorre", es decir, cuando vende su trabajo, comprometiéndose a darlo en una fecha más o menos fija a las empresas industriales, nacionales o extranjeras, y no llega a darlo en la fecha estipulada, es perseguido por las autoridades como un criminal. Una vez capturados, y sin oír defensa alguna de su parte, se le obliga, por la fuerza, a prestar los servicios prometidos. Es, en pocas palabras, el sistema de los trabajos forzados.
De: "El Tungsteno"

6/3/08

El importante papel de la Crítica

Toda ciencia como todo hombre, todo pensamiento como todo mecanismo, pueden aportar un rayo más de luz o algún contingente de fuerza progresiva para que la vida avance por horizontes más brillantes en el camino de la civilización; o al contrario, pueden constituir un elemento negativo de progreso, que en último examen, es una corriente estática. Y como para los fueros de la experiencia, base de toda ciencia, es necesario apreciar en todo trabajo lo que en justos términos, importe de algún modo los intereses del esfuerzo común; de ahí la razón de la existencia de los valores del espíritu, de ahí la necesidad de poner en transparencia la labor humana, con el objeto de precisar en qué grado y en qué sentido ejerce influjo en la grandiosa obra universal. Y he aquí el importante papel de la Crítica.

No debemos leer a los extranjeros solo por leer

En América todavía no se puede vivir en poesía sino de prestado, porque atravesamos aún por un período de formación; si bien es cierto que es necesario beber en las fuentes puras de los autores extranjeros para suscitar el buen gusto y los ideales, no por esto debemos seguir ciegamente, de un modo servil a los maestros, aun ahogando la voz de nuestra raza, de nuestro gusto innato y nuestras costumbres. Raza joven aún, en una naturaleza tan rica y grandiosa, como es la nuestra, no debemos, los peruanos en especial, leer a los extranjeros, sólo por leer, sin asimilar sus ideales, sólo para volver a escribir los mismos sentimientos y pensamientos, en las mismas formas y aun en el mismo género de elocución; no. Lectura metódica, tino para conocer nuestras vocaciones y más cultura...
Por ahora nosotros anhelamos, pues, la difusión de la cultura en la masa popular y el desarrollo económico, como medio de formar una literatura brillante, digna de nuestra amada Patria.